Descargue el documento completo: Razones para trabajar bajo la política del menor esfuerzo
Por:
Andrés Hurtado P
Socio Fundador eL LICEO
Hay ambientes laborales que terminan por enfermarnos[1]. Una patología común que amenaza la salud en el trabajo, es el estrés laboral. En ese tipo de estrés, se experimenta un estado de saturación y de agotamiento físico y mental. La carga laboral y la demanda de energía es superior a la capacidad disponible de la persona. El estrés se manifiesta como irritabilidad, depresión y frustración, lo que a su vez reduce la concentración y luego la productividad. Período a período la lucha po conseguir el número esperado es un reto arduo para los equipos. Una de las causas del agotamiento es que la carga impuesta supera la capacidad disponible (capacidad entendida como la cantidad de tareas sobre las que se puede trabajar en un perído de tiempo determinado). En tales casos, es frecuente que el horario regular no sea suficiente, y para terminar los compromisos, aparece la tentación de extender la jornada laboral. Entre los problemas del día a día, los entregables esperados en los proyectos estratégicos, las limitaciones de presupuesto para contratar o invertir en recursos, la velocidad con la que se tiene que reaccionar a los problemas y las posibilidades de comunicación permanente (producto de la tecnología disponible), hace que hayan ocasiones donde el ritmo sea frenético y no haya posibilidad para un respiro.
¿De dónde proviene la idea de que el valor que un recurso genera a la empresa tiene relación directa con la cantidad de carga que absorbe?
[1] Los últimos 10 años el estrés laboral y su impacto en la productividad de las empresas ha sido documentado por médicos, sicólogos, sociólogos; una consulta en algún motor de búsqueda de internet puede ilustrar este punto.